La autentica devoción a San Cayetano demuestra que Bergoglio es un hereje, cismático y apóstata

 

La Escritura nos advierte sobre los falsos pastores que estafan a la gente con un falso evangelio y que en lugar de buscar la salvación de las almas buscan su perdición. Es el caso de Bergoglio quien le robó a los pobres la autentica liberación que solo existe en el Evangelio de Jesucristo por medio del arrepentimiento para ser libres del Pecado y obtener la Vida Eterna. Pero Bergoglio desde Argentina se convirtió en un seudo mesías  dándoles soluciones aparentes a la gente pobre a cambio de la apostasía reemplazando a la Iglesia católica y a Jesucristo por una impostura política marxista intrínsecamente diabólica. Un Verdadero católico puede comprobar que la falsa devoción que Bergoglio promovió es contraria a Vida de San Cayetano.

 

Es conveniente pues que repasemos la Vida de San Cayetano para no permitir que la secta Bergogliana siga falsificando su imagen y desenmascara la teología marxista del Pueblo para que esta secta no sigan utilizándolo en su agenda marxista. La verdad nunca va unida a la mentira por lo tanto todo fiel católico está en la obligación moral de separarse de la secta Bergogliana so pena de excomunión automática si no lo hacen, porque el Magisterio de la Iglesia ha decretado la excomunión Ipso Facto para los que favorezcan a los herejes, cismáticos y apóstatas.

 

Fue un presbítero italiano, fundador de la Orden de Clérigos Regulares Teatinos.

Fiesta 7 de Agosto 

(1480 - +1547)

"No hay camino que conduzca al Cielo sino el de la inocencia o del arrepentimiento. El que se ha apartado del primero, debe tomar el segundo; de lo contrario, está eternamente perdido".

 

 

Nacionalidad: italiana. Nació en Vicenza el año 1480

San Cayetano estudió 4 años en la Universidad de Padua donde se distinguió en la teología y se doctoró en derecho civil y canónico en 1504. Fue nombrado senador en Vicenza .Se preparó durante 3 años para ser sacerdote. Fue ordenado en 1516, a los 36 años. Celebró su primera misa en la basílica de Santa María la Mayor. En esta ocasión, informó más tarde, Nuestra Señora se le apareció y colocó al niño Jesús en sus brazos.

 El 3 de mayo de 1524, con otras tres personas, incluyendo a Juan Pedro Caraffa, que después se convirtió en el Papa Pablo IV, formó la Congregación de los Clérigos Regulares (Teatinos) con el fin de promover el apostolado y la renovación espiritual del clero.
En 1522, Cayetano fundó un hospital en Venecia, Italia, para las víctimas de la enfermedad incurable.
Fundó un banco para ayudar a los pobres y ofrecer una alternativa a los usureros, que más tarde se convirtió en el Banco de Nápoles.
San Cayetano se distinguió por su asiduidad en la oración y por la práctica de la caridad para con el prójimo.
 

• San Cayetano fue contemporáneo de Lutero y jugo un papel importante en la reforma católica. Luchó contra la herejía luterana y calvinista. Cayetano dedicaría su vida a luchar contra la Reforma protestante. Se opuso a tres apóstatas, un laico, un agustino y un franciscano, que predicaban respectivamente el socinianismo, el calvinismo y el luteranismo.
• Se quedó en Nápoles donde había mas trabajo. La ciudad mejoró notablemente gracias a las prédicas y el trabajo apostólico del santo, que en ocasiones tuvo que enfrentarse con laicos y religiosos que predicaban el calvinismo, el luteranismo y otros errores.    
• Defensor de la Santa Eucaristía. San Cayetano implantó la bendición con el Santísimo Sacramento y promovió la comunión frecuente, en los 3 años que vivió en Venecia. 
  La orden que fundó San Cayetano   tenía como finalidad principal la renovación del clero, es decir la santificación del clero, sus otros objetivos eran la predicación de la sana doctrina, el cuidado de los enfermos y la restauración del uso frecuente de los Sacramentos.
• En Roma había fundado una cofradía del «Amor Divino». Se trataba de una asociación de celosos clérigos que se dedicaban con toda el alma a promover la gloria de Dios y su propia santificación.
•  La orden sacerdotal se propuso enmendar las negligencias del Clero y restaurar la corrupción moral de la gente.  Restaurar la observancia de la conducta piadosa en los templos dedicados a la adoración del Altísimo; trabajar en oposición a los herejes; ayudar a los enfermos y moribundos, en una palabra, se dedicó a promover el bienestar de los hombres lo mejor posible.
  

  

  
  
  
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  San Cayetano, por su infatigable celo, mereció ser llamado “cazador de las almas”.
• En el año 1524 fundó la orden de los Teatinos (o Clérigos Regulares) junto con el obispo Juan Pedro Caraffa (1476-1559), que más tarde sería elegido papa con el nombre de Paulo IV. El Papa que decretó a Perpetuidad que la elevación de un hereje como papa es invalida y Nula.
• Su celo por ayudar a los pobres no se limitaba a lo material pues procuraba la salvación de sus almas. A los enfermos los persuadía a ser virtuosos con sus fructíferos sermones.
• Tuvo muchas gracias espirituales, entre ellas ver a la Virgen Maria con el niño Jesús  también poseía el don de profecía, y milagrosamente curó a muchos enfermos   

Los teatinos fueron los primeros, en los tiempos modernos, en trabajar en la reforma del clero e inculcar hábitos de piedad en la gente. Su celo por la salvación de las almas y firmeza eran tan grandes que su nombre se daba comúnmente a los eclesiásticos que velaban más por la salvación de las almas.

Murió en Nápoles el domingo 7 de agosto de 1547, después de ofrecer su Vida para que no se extendiera la herejía.

 

Las autoridades de Nápoles, tanto civiles como eclesiásticas, habían decidido instituir la Inquisición en la ciudad, para proteger a los fieles más a fondo contra la herejía. Sin embargo, la gente se opuso a ella hasta tal punto que se temió una revuelta, y ni las exhortaciones y persuasiones de San Cayetano ni de otros hombres fueron de ninguna utilidad. El santo hombre estaba profundamente angustiado por el peligro de una ciudad tan grande y aún más de tantas almas. Por lo tanto, ofreció su vida como sacrificio para apaciguar la ira del Todopoderoso, rezando para que Dios lo aceptara, restaurara la paz y perdonara la ciudad y sus habitantes. El siguiente evento mostrará cuán complacido estaba el Todopoderoso con este sacrificio. Poco después de que el Santo se ofreció al Cielo, se enfermó gravemente y, repitiendo su oferta, murió de una manera muy pacífica y santa, teniendo el privilegio de ver a Cristo y a la Santísima Virgen. El Salvador le aseguró su salvación, la Madre Divina su protección hasta su muerte. Y, sin embargo, no moriría de ninguna otra manera que no sea como penitente; porque cuando el médico dijo que necesitaba una cama más cómoda, protestó enfáticamente en contra de ella, diciendo que en su última hora no permitiría que su cuerpo se sintiera cómodo, sino que se pondría en sus ropas penitenciales sobre las cenizas en el tierra, agregando: "No hay camino que conduzca al Cielo sino el de la inocencia o el arrepentimiento. El que se ha apartado del primero, debe tomar el segundo; de lo contrario, está eternamente perdido".

Recibió los últimos sacramentos con gran devoción, volvió sus ojos hacia el cielo y entregó su alma tranquilamente a Dios, en el año de nuestro Señor 1547. El conflicto en la ciudad poco después cesó y se restableció la paz, como si Dios hubiera deseado para mostrar que había aceptado la vida de san Cayetano como una ofrenda de paz para la salvación de innumerables almas. El Todopoderoso realizó muchos milagros para recompensar la gran fe que San Cayetano manifestó en la Divina Providencia, cuando instituyó una pobreza tan terminante en su nueva orden. Después de su muerte también, Dios lo honró haciendo muchos milagros a través de su intercesión.

Oración para implorar de San Cayetano el remedio de cualquier necesidad

Oh glorioso patriarca San Cayetano,
héroe de la más sublime santidad y amorosísimo
 protector nuestro! Humildemente te suplicamos que nos
obtengáis de Dios Nuestro Señor vernos libres,
ante todo, del mayor mal que es el pecado, y luego...
(aquí se expone la necesidad que padecemos y mal que nos aflige)
 Vos glorioso y bendito Santo,
que de tanto valimiento gozáis ante La Divina Providencia,
alcanzadnos la gracia que, según vuestra poderosa intercesión
podéis obtener del Divino Niño Jesús
que tan tiernamente lleváis en vuestros brazos,
y también la de amarle cada día más en la tierra,
para que así alcanzaremos un día cantar
sus divinas alabanzas con vos en la Gloria.
 Amén
 

(Se reza tres veces el Padre Nuestro, Ave María y Gloria Patri)
 El Sr. Obispo de Murcia concedió 50 días de indulgencias a los fieles que reciten lo anterior

San Cayetano ruega por nosotros.

En Argentina Bergoglio utilizó la devoción de San Cayetano como fachada para promover la lucha marxista de la “teología del Pueblo”