Festividad
30 de abril Vetus Ordo
29 de abril Novus Ordo
El Papa Pío ll, la canoniza en 1461, el Papa Pío Xll la declaró patrona de Italia en 1939.
Jesús le reveló a Santa Catalina de Siena que los homosexuales le causan náuseas a nuestro Señor y son despreciados incluso por el diablo
Santa Catalina de Siena, la gran mística religiosa del siglo XIV, transmitió las palabras de Nuestro Señor Jesucristo sobre el pecado de la homosexualidad, que contaminó a algunos del clero en su tiempo, el Renacimiento.
Nuestro Señor, Jesucristo, le revela a Santa Catalina de Siena cómo los homosexuales causan náuseas a Dios y cómo incluso los demonios no pueden soportar un pecado tan antinatural y desagradable.
Refiriéndose a los ministros sagrados que cometieron este pecado, Él le dijo:
Nuestro Señor hablando a Santa Catalina de Siena
Ellos [los homosexuales] no solo fallan al resistir la debilidad [de la naturaleza humana caída] ... pero lo hacen aún peor cuando cometen el pecado maldito contra la naturaleza. Al igual que los ciegos y los estúpidos, después de haber atenuado la luz de su comprensión, no reconocen la enfermedad y la miseria en que se encuentran. Porque esto no solo me causa náuseas, sino que es repugnante incluso para los demonios mismos a quienes estas criaturas depravadas han elegido como sus señores.
Para mí este pecado contra la naturaleza es tan abominable que solo por él cinco ciudades fueron destruidas en virtud del juicio de Mi Divina Justicia, que ya no podía soportar su iniquidad ...
Es desagradable para los demonios no porque el mal los desagrade o porque les agrada el bien, sino porque su naturaleza es angelical y huye al ver que se comete un pecado tan repulsivo. Si bien ciertamente es el demonio el que primero que golpea al pecador con la flecha envenenada de la concupiscencia, sin embargo, cuando un hombre realmente lleva a cabo un acto tan pecaminoso, el diablo se va.
(Santa Catalina de Siena, El diálogo, en Obras de Santa Catalina de Siena, Madrid: BAC, 1991, p. 292)
TIA -Tradition in Action
Santa Caterina de Siena y San Bernardino de Siena, llegaron a afirmar que la sodomía es el pecado más grave después del pecado en contra del Espíritu Santo, sin embargo, si se practica la sodomía persistentemente, en violación de los mandamientos de Dios, también se convierte en un pecado en el cual no hay perdón: “… Los que cometen el pecado maldito contra la naturaleza, son tales como los tontos y los ciegos, después de haber eclipsado a la luz de su inteligencia, no se dan cuenta del hedor y la miseria en la que están …” (Santa Catalina de Siena, el diálogo de la Divina Providencia, cap. 124)
1 Corintios 6: 9-10
¿No sabes que los injustos no heredarán el reino de Dios? No se dejen engañar; ni los inmorales, [fornicarios] ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los homosexuales, [ni los afeminados ni los sodomitas.] ... heredarán el reino de Dios.
Santo Tomás de Aquino nos explica en la Catena Aurea la correcta interpretación de Mateo 7 que desgraciadamente muchos homosexuales al igual que el heresiarca Bergoglio e ignorantes utilizan maliciosamente para torcer la Palabra de Dios para condescender con los vicios e incluso la utilizan como excusa para justificar a los homosexuales. Es necesario corregir esa interpretación herética que hoy muchos repiten como mantras para atacar las enseñanzas morales de la Iglesia católica. San Pablo nos enseñar que nosotros los que pertenecemos al pueblo Santo de Dios juzgaremos incluso a los ángeles caídos.
En este pasaje completo Jesucristo no prohíbe juzgar sino que condena la hipocresía al Juzgar y nos enseñar que cuando Juzguemos quitemos la paja del ojo que nos impide juzgar y lo hagamos con rectitud y justicia.
"No queráis juzgar para que no seáis juzgados; pues con el juicio con que juzgareis, seréis juzgados: y con la medida con que midiereis se os medirá".
San Jerónimo:
Mas si prohíbe juzgar, ¿cómo San Pablo juzga al incestuoso de Corinto ( 1Cor 5), y San Pedro acusa de mentira a Ananías y Sáfira ( Hch 4)?
Pseudo-Crisóstomo, opus imperfectum in Matthaeum, hom. 17
Algunos exponen este pasaje en el sentido de que Dios no prohíbe a los cristianos, por medio de este precepto, que corrijan a otros por benevolencia, sino que los cristianos desprecien a los cristianos por jactancia de su propia justicia, odiando y condenando a otros, muchas veces por solas sospechas, ejecutando su propio odio bajo las apariencias de piedad.
San Juan Crisóstomo, homiliae in Matthaeum, hom. 23,2
Por eso no dijo: "No dejes descansar el pecado", sino más bien: "No juzgaréis", esto es, no seas amargo juez. Corrige, sí, pero no como enemigo que busca la venganza, sino como médico que brinda la medicina.
Pseudo-Crisóstomo, opus imperfectum in Matthaeum, hom. 17
Para que unos cristianos no corrijan así a los otros, convienen las palabras que dicen: "No queráis juzgar". Pero si no los corrigen así, ¿acaso obtendrán el perdón de sus pecados, porque se ha dicho: "No seréis juzgados"? ¿Quién consigue la indulgencia del primer mal sólo por no añadirle otro después? Hemos dicho esto, pues, queriendo manifestar que aquí no se trata de no juzgar al prójimo que peca contra Dios, sino del que peca contra nosotros. El que no juzga al prójimo por el pecado cometido contra él, no es juzgado por Dios respecto de su pecado, sino que le perdona su deuda, como él perdonó.
San Juan Crisóstomo, homiliae in Matthaeum, hom. 23,1
Por eso Jesucristo nos invita a eliminar todo obstáculo que nos impida juzgar para no convertirnos en hipócritas, nos invita primero a sacarnos la paja de nuestro ojo para así poder juzgar con rectitud y Justicia. Lo que la Palabra de Dios nos prohíbe es juzgar hipócritamente.
"No juzguéis según la apariencia. Juzgad con juicio justo.»" Juan, 7:24 - Bíblia Católica Online
Lev 19:15 con justicia juzgarás a tu prójimo.
Es mas en este mundo todos los católicos debemos tener la capacidad de juzgar con rectitud y Justicia.
San Agustín, de civitate Dei, 20,5
1 Corintios 6:3
2. ¿No sabéis que los santos han de juzgar algún día a este mundo? Pues si el mundo ha de ser juzgado por vosotros ¿no seréis dignos de juzgar de estas pequeñeces?
3. ¿No sabéis que hemos de ser jueces hasta de los ángeles?, ¿cuánto más de las cosas mundanas?
4. Si tuviereis, pues, pleitos sobre negocios de este mundo, tomad por jueces, antes que a infieles, a los más ínfimos de la Iglesia...
9. ¿No sabéis que los injustos no poseerán el reino de Dios? No queráis cegaros, hermanos míos, ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros,
10. ni los afeminados, ni los sodomitas, ni los ladrones, ni los avarientos, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los que viven de rapiña, han de poseer el reino de Dios.
11. Tales habéis sido algunos de vosotros en otro tiempo; pero fuisteis lavados, fuisteis santificados, fuisteis justificados, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, y por el Espíritu de nuestro Dios.
Bergoglio, cuando dice que no es nadie para juzgar a un sacerdote homosexual, está juzgando la Palabra de Dios que condena el pecado de la homosexualidad, es decir que Bergoglio está levantando juicio pero no contra el Pecador impenitente sino contra la Palabra de Dios y contra la doctrina moral de la Iglesia Católica. Están Juzgando a Dios y con esto reconoce públicamente que no es Papa, ya que declara que no tiene el poder de juicio que le dio Jesucristo a San Pedro para condenar los pecados mortales. Bergoglio se auto declaró incompetente para condenar el pecado de la homosexualidad que claramente la Palabra de Dios condena. Es decir que Bergoglio actuó maliciosamente como un anti Pedro y un antiCristo para apoyar la homosexualidad y contradecir la Palabra de Dios.
“Otro de los nombres dados a Pedro es el de Cefas. que viene del griego Psefos que significa según el diccionario Griego-Español Vox "Piedrecita para votar, decreto acordado, juicio" esta es la misma palabra que se utiliza en Apocalipsis 2 : 17. Eran dos piedrecitas que se le daba al jurado y que decidía si una persona era culpable o inocente en un juicio del sistema judicial griego, según fuera depositada la piedra blanca o la negra. Lo cual concuerda perfectamente con las palabras de JESÚS: "Lo que ligares en la tierra, será ligado en el cielo…" poder de juicio. A Pedro se le llama Piedra 162 veces en el Nuevo Testamento y Cefas 8 veces.
San Agustín, sermones, 351,8
O de otro modo, no manda simplemente que no se juzguen todos los pecados, sino que hizo esta prohibición a aquellos que han cometido muchas culpas, y juzgan a los demás por defectos ligeros. Así como San Pablo no prohíbe juzgar sencillamente a los que pecan, sino que reprende a los discípulos que se permiten juzgar a sus maestros, enseñándoles que no debemos juzgar a los que sean más que nosotros.
Tenga en cuenta que esto no incluye a los herejes ni a los falsos pastores. Ya que el Magisterio de la Iglesia excomulga a quienes colaboran con los herejes. Y Santo Tomás también condena la falsa obediencia a un superior que abusa de la autoridad para hacer que alguien desobedezca a Dios. Por eso San Pedro y los apóstoles enseñaron que debemos obedecer a Dios antes que a los hombres.
San Juan Crisóstomo
''No prohíbe el Señor la reprensión y corrección de las faltas de los demás, sino el menosprecio y el olvido de los propios pecados, cuando se reprenden los del prójimo. Conviene, pues, en primer lugar examinar con sumo cuidado nuestros defectos, y entonces pasemos a reprender los de los demás.'' (En Catena Aurea, Vol. I, p. 421).
San Hilario, homiliae in Matthaeum, 5
De otro modo, Dios prohíbe que se forme juicio acerca de sus disposiciones, porque así como los juicios entre los hombres se forman de cosas inciertas, así este juicio contra Dios se basa en la duda, lo cual rechaza enteramente de nosotros, para que se conserve mejor la certeza de la fe. Juzgar mal de las cosas de Dios no es un pecado como el juicio falso acerca de las demás cosas, sino que se hace principio de crimen.
Como explica San Agustín el fin de reprender a un pecador público siempre debe ser para llevarlo al arrepentimiento para que se salve no para que lo desesperemos en su enmienda.
Por eso Jesucristo nos invita a eliminar todo obstáculo que nos impida juzgar para no convertirnos en hipócritas, nos invita primero a sacarnos la paja de nuestro ojo para así poder juzgar con rectitud y Justicia. Lo que la Palabra de Dios nos prohíbe es juzgar hipócritamente.
"No juzguéis según la apariencia. Juzgad con juicio justo.»" Juan, 7:24 - Bíblia Católica Online
Lev 19:15 con justicia juzgarás a tu prójimo.
Es mas en este mundo todos los católicos debemos tener la capacidad de juzgar con rectitud y Justicia.
San Agustín, de civitate Dei, 20,5
De aquí debemos sacar como consecuencia que Jesús juzgará juntamente con sus discípulos. Por esto se dice a los judíos en otro lugar ( Mt 12,27; Lc 11): "Y serán jueces vuestros". No debemos creer que porque el Señor dice que se sentarán sus discípulos sobre doce tronos, no juzgarán en unión con el Señor más que sólo doce hombres a todo el género humano, porque el número doce expresa toda una multitud de jueces, tomando en cuenta que las dos fracciones que constituyen el número siete -esto es, tres y cuatro- significan con frecuencia la universalidad de las cosas; y multiplicadas esas dos fracciones forman el número doce. De otro modo Matías, que fue elegido en lugar del traidor Judas, ni el apóstol San Pablo, que trabajó más que todos los otros, no tendrían donde sentarse en el tribunal. El mismo Pablo no deja lugar a dudas de que él, en unión con los otros santos, serán jueces, cuando dice ( 1Cor 6,3): "¿Ignoráis que nosotros juzgaremos a los ángeles?"
1 Corintios 6:3
2. ¿No sabéis que los santos han de juzgar algún día a este mundo? Pues si el mundo ha de ser juzgado por vosotros ¿no seréis dignos de juzgar de estas pequeñeces?
3. ¿No sabéis que hemos de ser jueces hasta de los ángeles?, ¿cuánto más de las cosas mundanas?
4. Si tuviereis, pues, pleitos sobre negocios de este mundo, tomad por jueces, antes que a infieles, a los más ínfimos de la Iglesia...
9. ¿No sabéis que los injustos no poseerán el reino de Dios? No queráis cegaros, hermanos míos, ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros,
10. ni los afeminados, ni los sodomitas, ni los ladrones, ni los avarientos, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los que viven de rapiña, han de poseer el reino de Dios.
11. Tales habéis sido algunos de vosotros en otro tiempo; pero fuisteis lavados, fuisteis santificados, fuisteis justificados, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, y por el Espíritu de nuestro Dios.
Glorificad a Dios en vuestro cuerpo
18. Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que cometa el hombre, está fuera del cuerpo; pero el que fornica contra su cuerpo peca.Bergoglio, cuando dice que no es nadie para juzgar a un sacerdote homosexual, está juzgando la Palabra de Dios que condena el pecado de la homosexualidad, es decir que Bergoglio está levantando juicio pero no contra el Pecador impenitente sino contra la Palabra de Dios y contra la doctrina moral de la Iglesia Católica. Están Juzgando a Dios y con esto reconoce públicamente que no es Papa, ya que declara que no tiene el poder de juicio que le dio Jesucristo a San Pedro para condenar los pecados mortales. Bergoglio se auto declaró incompetente para condenar el pecado de la homosexualidad que claramente la Palabra de Dios condena. Es decir que Bergoglio actuó maliciosamente como un anti Pedro y un antiCristo para apoyar la homosexualidad y contradecir la Palabra de Dios.
“Otro de los nombres dados a Pedro es el de Cefas. que viene del griego Psefos que significa según el diccionario Griego-Español Vox "Piedrecita para votar, decreto acordado, juicio" esta es la misma palabra que se utiliza en Apocalipsis 2 : 17. Eran dos piedrecitas que se le daba al jurado y que decidía si una persona era culpable o inocente en un juicio del sistema judicial griego, según fuera depositada la piedra blanca o la negra. Lo cual concuerda perfectamente con las palabras de JESÚS: "Lo que ligares en la tierra, será ligado en el cielo…" poder de juicio. A Pedro se le llama Piedra 162 veces en el Nuevo Testamento y Cefas 8 veces.
San Agustín, sermones, 351,8
Con el nombre de ángeles designó también a los hombres, que juzgarán con Cristo, pues siendo los ángeles nuncios, como a tales consideramos también a todos los que predicaron a los hombres su salvación.
Sigue: "Y serán congregados ante El todos", etc.
San Agustín, de civiate Dei, 20,24
Esta reunión se verificará por ministerio de los ángeles, a quienes se dice en el salmo: "Congregad al Señor todos sus Santos" ( Sal 49,5).
San Agustín, de civitate Dei, 20,24
Bajará, pues, con los ángeles, que convocó de las alturas para celebrar el juicio, por lo que dice: Y todos sus ángeles con El.
''Cada cual ha de ser juzgado en el estado en que salga de este mundo; y por esto ha de velar todo cristiano, para que la llegada del Señor no le encuentre desprevenido'' (San Agustín en Catena Aurea vol. III, p. 202).
San Agustín, de civitate Dei, 20,24
Bajará, pues, con los ángeles, que convocó de las alturas para celebrar el juicio, por lo que dice: Y todos sus ángeles con El.
''Cada cual ha de ser juzgado en el estado en que salga de este mundo; y por esto ha de velar todo cristiano, para que la llegada del Señor no le encuentre desprevenido'' (San Agustín en Catena Aurea vol. III, p. 202).
San Bernardino de Siena, predicador franciscano del siglo XV, hace un análisis preciso de las consecuencias psicológicas del vicio de la homosexualidad. El ilustre franciscano escribió: “Ningún pecado tiene mayor poder sobre el alma que la maldita sodomía , que fue odiada siempre por todos los que viven según Dios ... .. Tal pasión para indebidamente las fronteras de las formas de locura. Este vicio perturba la inteligencia, rompe un estado elevado y generoso de alma, arrastra los grandes pensamientos llevándolos hacia la nada, hace que [los hombres] sean pusilánime e irascible, obstinado y endurecidos, tonto servil e incapaz de nada. Por otra parte, la voluntad, siendo agitada por el deseo insaciable de placer, ya no sigue la razón, sino ... el furor. Alguien que vivió practicando el vicio de la sodomía sufrirá más dolores en el infierno que cualquier otro, porque este es el peor pecado que existe .”(San Bernardino de Siena, Predica XXXIX, en Le prediche volgari (Milan:. Rizzoli, 1936 ), pp 869ff., 915, en F. Bernadei, op. cit., p. 11f)
ResponderEliminar“Cuánto mayor es la altura a que le sublimó Dios, dice San Bernardo, tanto mayor será el precipicio” (...). “Quien se cae del mismo suelo, dice san Ambrosio, no se suele hacer mucho daño, pero quien cae de lo alto no se dice que cae, sino que se precipita, y por eso la caída es mortal” (...). San Alfonso Ma de Ligorio.
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