La monja apóstata Lucía Caram no quiere que se acabe la guerra en Ucrania pues se le acaba el negocio.
No olvidemos tampoco que detrás de esta guerra en Ucrania está el avance de la ideología del arco iris que tanto defiende la apóstata Lucía Caram.
Tampoco olvidemos que esta monja apóstata blasfema llamó a los sacerdotes de la Sacristía de la Vendée «gilipollas» e «imbéciles»
¿Qué más podemos esperar de esta apóstata enemiga de Dios y de la Iglesia?
Los masones, con sus obras filantrópicas, sólo buscan la adulación del mundo: "Ucrania otorga a sor Lucía Caram la Orden de la Princesa Olga por su labor humanitaria"
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