“La ley de Cristo, que se cumple en el amor, nos obliga a procurar la salvación de las almas más que la del cuerpo ” San Francisco de Asís.
Todos los que aman al Señor con todo el corazón, con toda el alma y la mente, con todas las fuerzas, aman a sus prójimos como a sí mismos, aborrecen a sus cuerpos con los vicios y pecados, reciben el cuerpo y la sangre de nuestro Señor Jesucristo y hacen frutos dignos de penitencia: ¡oh, cuán dichosos y benditos son aquellos y aquellas que tales cosas ponen en práctica y perseveran en ellas!, porque reposará sobre ellos el Espíritu del Señor y pondrá junto a ellos su habitación y morada; son hijos del Padre celestial, cuyas obras realizan, y son esposos, hermanos y madres de nuestro Señor Jesucristo.
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BENDICIÓN DE SAN FRANCISCO
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En el herético Laudato Si, Bergoglio omitió del Cántico de las criaturas de San Francisco el pasaje que advierte sobre el Pecado Mortal
Ay de aquellos que mueran
en pecado mortal.
Bienaventurados a los que encontrará
en tu santísima voluntad
porque la muerte segunda no les hará mal.
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porque la muerte segunda no les hará mal.
Alaben y bendigan a mi Señor
y denle gracias y sírvanle con gran humildad.
Cántico de las Criaturas.
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