La mafia de Bergoglio, pro gay y pro sacrilegio.

Don Mario’s Moral Mafia

         Escrito por  Christopher A. Ferrara

              Religión la voz libre

Después de más de tres años del pontificado bergogliano no hay duda de su principal línea  de desarrollo, que es la gran obsesión de Francisco:  la admisión de los adúlteros públicos impenitentes en “segundos matrimonios” a la Santa Comunión, la “propuesta de Kasper” que ha estado promoviendo casi desde el momento de su elección. Con ese fin, Francisco sin descanso ha puesto en posición una especie de mafia moral para llevar a cabo su proyecto. Vamos a conocer a algunos de sus soldados.

En primer lugar, conozcamos al arzobispo Vincenzo Paglia (“El ejecutor”), jefe del (ahora) ridículamente mal llamado Consejo Pontificio “para la familia”:

Paglia supervisó la producción del primer programa de “educación sexual” aprobado por el Vaticano en la historia de la Iglesia, un documento tan asquerosamente inmoral que ha provocado ya una petición de los fieles pidiendo a Francisco que ordene su retirada ( ver aquí: a petition from the faithful ). Observen  las gafas con los colores del arcoíris de Paglia, que están bastante de acuerdo con su simpatía por la sodomía (ver aquí: sympathy for sodomy): "En el mundo hay 20 o 25 países donde la homosexualidad es un delito. Me gustaría que la iglesia luchase contra todo esto ".

Paglia es el hombre indicado por Francisco puesto a cargo de la Academia Pontificia para la Vida y el Instituto Juan Pablo II de Estudios sobre el Matrimonio y la Familia (como Gran Canciller). Paglia sustituye a las cabezas relativamente conservadoras de los dicasterios, quienes, habiendo defendido las enseñanzas de Juan Pablo II y Benedicto XVI  al contrario, bloquearon el camino de la Comunión Eucarística a los adúlteros impenitentes en "segundos matrimonios."
 

 

Paglia defiende abiertamente la “propuesta de Kasper”, es decir: —la misma propuesta de Francisco —  Dar la Santa Comunión (sacrílega) a los adúlteros públicos impenitentes en “segundos matrimonios”.  Durante el falso Sínodo sobre la Familia, Paglia también supervisó la publicación de un libro que presenta argumentos en favor de la destrucción de toda la enseñanza previa en sentido contrario, sobre todo la de Juan Pablo II y Benedicto XVI, y está  a favor del falso “camino penitencial” de Kasper que permitiría a algunos adúlteros en "segundos matrimonios" recibir la Santa Comunión, mientras estos adúlteros reconsideran si obedecerán la enseñanza de la Iglesia con respecto a continuar con sus relaciones sexuales adúlteras.
Paglia declara que los nuevos títulos que Francisco le ha otorgado significan que el Papa desea que él “continúe  el nuevo curso que emana del Sínodo de los Obispos y su encíclica [sic] Amoris Laetitia.” Y, qué es este nuevo curso? Qué otra cosa sino: La comunión santa para los adúlteros impenitentes en "segundos matrimonios."

A continuación, conozcamos a monseñor Pierangelo ( "El violinista") Sequeri:

 

 

Mons. Sequieri, un académico liberal y músico, sustituye a monseñor Livio Melina como Presidente del Instituto Juan Pablo II (para servir bajo Paglia como gran canciller). Melina había "defendido la perenne enseñanza de la Iglesia: que los divorciados vueltos a casar que no viven como ‘hermano y hermana’ no deben ser admitidos a la sagrada comunión.”

Melina también había insistido valientemente (ver aquí: bravely insisted ) que Amoris Laetitia "no cambiaba la disciplina de la Iglesia" y que “ continúa  vigente la norma de que la admisión de la comunión a los divorciados y ‘vueltos a casar,’ va en contra de la disciplina de la Iglesia (Aparte de las situaciones previstas por  Familiaris Consortio 84 y Sacramentum Caritatis 29 ).” Naturalmente, Melina fue eliminado. (Fue “misericordiado” por Francisco y echado del puesto).

 

 

 

 

El siguiente es el único estadounidense miembro de la mafia bergogliana, un equivalente al asesor (consigliere) irlandés  Tom Hagan  en El Padrino: el obispo Kevin ("el Jokester") Farrell de Dallas:

 

Francisco acaba de poner a Farrell a la cabeza de su recién creado súper dicasterio: el Consejo Pontificio para los Laicos, Familia y Vida que absorberá y así eliminará cualquier obstáculo que quede, -para propiciar el abierto sacrilegio eucarístico-, dando la Santa Comunión a los adúlteros impenitentes en "segundos matrimonios”- todavía presente en el Consejo Pontificio para la Familia y el Consejo Pontificio para los Laicos, los cuales dejarán de existir el 1 de septiembre (mientras que la Academia Pontificia para la vida seguirá existiendo, el nombramiento de Paglia como su cabeza retirará cualquier obstáculo que haya, incluyendo al filósofo alemán Josef Siefert, que publicó una crítica devastadora de Amoris Laetitia, instando a Francisco a corregir sus errores contra la Fe.) (ver aquí: devastating critique  

El semi-conservador a conveniencia Farrell, equipado con el adecuado "agudo sentido del humor," es un prelado adecuadamente "pro-gay". Farrell instaló como pastor de una parroquia de Texas, a un cura homosexual descubierto participando en una página web gay sexualmente explícita.

(Este pervertido fue retirado como pastor sólo después de una protesta pública.) Farrell acepta claramente como un hecho que habrá sacerdotes homosexuales, formados y ordenados, como tal, con pleno conocimiento de su "orientación". Citando algunas declaraciones de Francisco relativas a "respetar" a "las personas homosexuales," Farrell declaró: "La Iglesia todavía tiene la expectativa de que los sacerdotes deben comprometerse a una vida de castidad ya sean homosexuales o heterosexuales."

Sí, si eres un sacerdote homosexual, la Iglesia todavía "espera" que seas célibe! De lo contrario, no hay problema!

Esto contradice la enseñanza constante de la Iglesia que los hombres "homosexuales" no son aptos para la ordenación y no deben ser admitidos en el seminario.

 

(Ver: that “gay” men are unfit for ordination and must not be admitted to the seminary)

Pero, como Francisco  declaró  famosamente en el contexto de la pregunta sobre el flagrante homosexual monseñor Battista Ricca, a quien nombró como prelado interino en el Instituto para las Obras de Religión (IOR), del banco del Vaticano, quien fue encontrado atrapado en un ascensor con un joven y no precisamente hablando) “¿Quién soy yo para juzgar?” 

No se puede pasar por alto a un miembro menor pero significativo en esta mafia moral: conozcan a Thomas Rosica (“the Mug”) :

 

 

El virulentamente pro "gay" Rosica, es rencoroso y vengativo, es el agregado  de la Oficina de Prensa del Vaticano en lengua inglesa, cuyos abogados demandaron al editor del blog Vox Cantoris por contar  la verdad sobre él.

Rosica está encantado con el nombramiento de Farrell, y le da la bienvenida como a "uno de los nombramientos y gestores de reestructuración más significativos en el ministerio petrino [de Francisco]", porque "el obispo Farrell tendrá una preocupación muy especial en aplicar en la práctica el hito de Francisco, la 'Exhortación Apostólica, Amoris Laetitia". Es decir, Farrell tendrá una" preocupación muy especial "por encontrar la manera de permitir el sacrilegio eucarístico de los adúlteros (divorciados recasados) ".

Fue Rosica  quien declaró de mal humor durante el Sínodo 2016: “El jubileo de la misericordia requiere un lenguaje de misericordia, en particular, al hablar de los homosexuales o las personas gays. No "tenemos lástima" de las personas homosexuales, sino que las reconocemos por lo que son. Ellos son nuestros hijos e hijas, hermanos y hermanas”.
 "Farrell aparentemente está de acuerdo, por eso defendió firmemente a Rosica cuando este último denunció que existía un "centro de odio en la blogosfera católica -refiriéndose a los blogs de laicos católicos que reconocen que Rosica es una víbora, y que necesita ser desenmascarado como un enemigo de la Fe y expulsado de cualquier posición de autoridad en la Iglesia.

Farrell, por si alguien lo duda, está completamente a favor de dar la Santa Comunión a adúlteros impenitentes. Así se refirió respecto a Amoris Laetitia poco después de su publicación: "Algunos sienten que Francisco no avanza lo suficiente como para dar esperanzas a aquellos en matrimonios irregulares, otros sienten que compromete la enseñanza tradicional. En mi opinión, refleja la llamada de Jesús a su Iglesia para continuar su misión de salvar y curar.  Farrell también elogió calurosamente los comentarios hechos por el cardenal Christoph Schönborn de Viena, sobre Amoris L, que fue uno de los defensores de la apertura de la comunión a los divorciados vueltos a casar en los dos Sínodos de los Obispos sobre la familia ".
 

Esto nos lleva al siguiente miembro de la mafia. Conozcamos al cardenal Christoph ("payaso") Schönborn:

 

Schönborn es el intérprete designado por Francisco de Amoris Laetitia, es decir, el autorizado para declarar que la doctrina defendida por Juan Pablo II ha "evolucionado” para contradecirse a sí misma, por lo que el camino está abierto "en algunos casos" (es decir, todos los casos a la larga) a la sagrada  comunión para los adúlteros en "segundos matrimonios."

 

(Ver: Francis’s designated interpreter of Amoris Laetitia)

 

Luego está el famoso, pero más bajo en el ranking, del oráculo de Francisco. Conoce a Antonio ("El portavoz") Spadaro:

 

 

Al editor de Civiltà Catholica, Spadaro, compañero jesuita liberal de Francisco y hombre de confianza, se le asignó la tarea de anunciar que el Sínodo falso de la familia “‘sentó las bases’ para que los divorciados vuelto a casar civilmente puedan ser admitidos a los sacramentos" y que, con respecto a la Santa Comunión por los adúlteros impenitentes en "segundas uniones”, Amoris Latetia "afirmaba esencialmente que todos los casos no pueden ser encerrados dentro de una norma general válida para todos, siempre y en todos los casos."

 

Es decir, que algunos adúlteros “en segundas uniones" pueden ser admitidos a la sagrada comunión.

 Pero ¿qué casos estarían exentos de la "norma general"?

 

 

 

Esa pregunta nos lleva, finalmente, al Capo di tutti capi: Conozcan a Jorge Mario ("el Misericordioso") Bergoglio, alias "padre Bergoglio", como él se llamó  a sí mismo cuando dio el permiso telefónico para comulgar a una mujer que vivía en adulterio:
(ver: telephonic permission to receive Holy Communion to a woman living in adultery)

 

 

Francisco insiste en que sigue siendo Jorge Mario Bergoglio, después de haber renovado su pasaporte bajo ese nombre (having renewed his passport under that name)

Pero, bajo el alias “de Francisco el Papa," Don Mario ha dictado cada movimiento a su mafia moral de acuerdo con la política que reafirmó en su discurso a un grupo de polacos jesuitas durante su viaje a Polonia: la moral sexual no es blanca y negra, sino gris. ¡Todo depende de la situación! La cita, autorizada para ser publicada en Civiltà Catholica por Spadaro, fue:

 

"Quiero añadir algo ahora. Les pido que trabajen con los seminaristas. Por encima de todo denles lo que no han recibido en los Ejercicios [de San Ignacio]. La Iglesia de hoy tiene necesidad de crecimiento en la capacidad de discernimiento espiritual. Algunos planes de formación sacerdotal corren el riesgo de educar a la luz de las ideas que son demasiado claras y marcadas, y por lo tanto se actúa rígidamente con unos límites y criterios a priori y que prescinden de situaciones concretas: "Esto debe hacerse, esto no debe hacerse "....

Es necesario formar a los futuros sacerdotes no con ideas generales y abstractas, sino con este objetivo de discernir los espíritus, para que puedan ayudar a las personas en su vida concreta. Es realmente necesario para que puedan entender esto: en la vida no todo es blanco y negro. ¡No! En la vida prevalecen las sombras de gris. Es necesario, entonces, enseñar cómo discernir en esta zona gris.

Así, Don Mario ha dado a sus soldados de infantería sus órdenes: No hay que tener ideas claras y marcadas sobre la moral sexual, sino unas ideas poco claras y confusas, lo que requiere "discernimiento de espíritus”: en lugar de decirle a la gente simplemente que deberían modificar sus vidas y dejar de cometer pecados carnales, es todo una zona gris. Y cuando se trata de la conducta sexual, deben haber como mínimo “Cincuenta sombras de grey”.

 

En cuanto a otros asuntos, sin embargo, como la "desigualdad" y la pena de muerte, Don Mario sin embargo exige la más aguda de las distinciones en blanco y negro: "Esto debe hacerse, esto no debe hacerse" ¡en efecto!

 

Por lo tanto, — adjunto al cumplimiento de la gran obsesión de Don Mario — debe haber una apertura -al sacrilegio- a la Santa Comunión para  adúlteros impenitentes en "segundos matrimonios." Pero para concubinos también! Como Don Mario anuncia en Amoris Laetitia, por primera vez en 2.000 años de historia de la Iglesia:

 

“Por lo tanto, ya no puede decirse simplemente que todos los que están en una situación "irregular" estén viviendo en un estado de pecado mortal y estén privados de la gracia santificante. Más aquí se trata de mera ignorancia de la regla. Un sujeto puede conocer muy bien la regla, sin embargo, tienen grandes dificultades para la comprensión "de los valores inherentes", o está en una situación concreta que no permite que él o ella puedan actuar de manera diferente y decide de otro modo sin pecar.”

 

¡No están más en pecado! ¿Desde cuándo? ¡Desde Francisco! Él ha decretado que ya no puede "simplemente" decirse que la Sagrada Comunión deba ser negada a los adúlteros impenitentes en "segundas uniones" (como la hermana de Bergoglio) o concubinos (como la sobrina de Bergoglio) debido a que algunos de ellos podrían estar en estado de gracia, incluso si saben que la Iglesia enseña que lo que están haciendo es inmoral. ¿Quién lo sabe? ¡Francisco lo sabe!

Pero, ¿quiénes son los pocos afortunados a los que no se les aplican las reglas de la Iglesia que prohíben a los adúlteros y concubinos recibir la Santa Comunión? Este discernimiento corresponde a los maestros recién formados en "discernimiento de espíritus” su tarea es averiguarlo, mientras navegan por la gran nueva "zona gris" de la moral sexual de Don Mario, donde antes sólo había gran claridad, como existe en cualquier otra enseñanza moral de la Iglesia .

El periodista católico Phil Lawler señala que Francisco dio a Paglia una "lista de preocupaciones” en las que desea que Paglia ponga su atención, pero que de esta lista “está notoriamente ausente temas como el aborto y la eutanasia, el divorcio y la anticoncepción", asuntos sobre los cuales los católicos desearon declaraciones durante el pontificado de San Juan Pablo II. "Dada esta evidencia abrumadora, Lawler se pregunta si" Francisco se está apartando deliberadamente de las enseñanzas de  Juan Pablo II sobre el matrimonio, la familia , y la vida”, es decir, se pregunta si Francisco se aparta deliberadamente de la clara ortodoxia. Es una gran preocupación de un comentarista de los medios de comunicación expresada públicamente con respecto a un Romano Pontífice.

 

Sí, todo este artículo es un ejercicio de ironía. Pero la burla es necesaria respecto a esta burla permanente y cada vez más grave, de este pontificado, que sin duda pasará a la historia de la Iglesia como una anomalía grotesca superando al pontificado del anatematizado del Papa Honorio, el cual, en comparación parece benigno..